Prunus armeniaca, llamado comúnmente damasco, albaricoque, albergero o chabacano, es un árbol frutal originario de China (donde fue hallada la variedad originaria silvestre), Turquía, Irán, Armenia, Azerbaiyán y Siria.
Es un árbol de 3 a 6 metros de altura, caducifolio, inerme o algo espinoso, con las hojas, pecioladas y estipuladas que miden de 5 a 10 cm por 3.5 a 8 cm, y son ovadas, suborbiculares o cordiformes, acuminadas, de margen doblemente aserrado, de haz y envés glabrescentes, rojizas cuando jóvenes, con algunas glándulas en la base del limbo. Las flores son solitarias o en fascículos de 2-6, subsésiles, con receptáculo de 5 a 7 mm, acopado o tubular, de interior anaranjado y exterior purpúreo o amarillento. Los sépalos, de 5 a 7 mm, son reflejos, de obovados a oblongos, de margen denticulado y subciliado, obtusos, purpúreos, mientras los pétalos miden 10 a 15 mm y son obovados, blancos o de un rosa pálido. El ovario es pubescente y da un fruto de 3 a 6 cm, subgloboso o elipsoidal, velutino, amarillento o anaranjado, con un surco longitudinal. El mesocarpo, comestible, es de sabor más o menos dulce y el endocarpo es comprimido, liso o ligeramente arrugado, aquillado, con dos aristas paralelas a la quilla, adherido al mesocarpo.
El albaricoquero es originario de Asia central, en la zona comprendida entre el mar Negro y el noroeste de China. Armenia tiene una gran tradición de su cultivo desde tiempos remotos dando lugar al nombre científico de la especie. En los países cercanos a Armenia se le suele llamar «manzana armenia».
Se cree que los griegos lo introdujeron en Europa aproximadamente en el siglo V a. C.2 Hacia el año 70 a. C., los romanos lo extendieron aún más llamándole a praecox pues florecía temprano en la primavera.
